Uno de los ejercicios que más me ha gustado del taller ha sido el de experimentar a dibujar contornos ciegos. Los ojos han de mirar sólo al objeto o ser que estás dibujando y no al papel. En el taller hicimos varias pruebas. Los resultados son divertidos y muy imperfectos. Pero aún así, o precisamente por eso, me gustan. Algunos incluso más que si los hubiera hecho mirando también el papel de vez en cuando.
Dice Danny Gregory que dibujar es aprender a mirar y que a él, dibujar le ha enseñado a amar las cosas como son, a descubrir la belleza de cada objeto, de cada animal, de cada planta, de cada persona que dibuja. !Qué razón tiene! La belleza está en todas partes, sólo hay que pararse a descubrirla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario